Mejor, no más" es el lema de una nueva economía

La activista medioambiental y cineasta Annie Leonard tiene un don para ver las cosas conocidas bajo una nueva luz que abre posibilidades de transformación.

Su cortometraje The Story of Stuff (La historia de las cosas ) supuso un momento "a-ha" para muchos de sus 12 millones de espectadores al revelar el precio ecológico de una sociedad hiperconsumista en la que la acumulación de posesiones se ha convertido en la principal medida del éxito. La genialidad de Leonard consiste en alejarse de un tono sermoneador y culpabilizador para concentrarse en las estructuras económicas subyacentes que alimentan el consumismo desenfrenado y poner de relieve soluciones prácticas a la crisis.

En posteriores películas en línea, Leonard aporta una iluminación similar de sentido común a temas tan variados como el agua embotellada, la sentencia judicial Citizens United, que amenaza con ahogar la política estadounidense en el dinero de los peces gordos, y el mito de que Estados Unidos está demasiado arruinado para permitirse servicios públicos y normativas medioambientales. El año pasado, Leonard fue nombrado director ejecutivo de GreenpeaceUSA.

Este corpus de trabajo la convirtió en la elección perfecta para inaugurar la entusiasta conferencia Just Giving, que explora la idea de "Better, Not More...Principles and Practices for the Next Economy" (Mejor, no más... Principios y prácticas para la próxima economía), patrocinada por la Edge Funders Alliance en Baltimore a principios de este mes.

En su discurso de apertura, planteó cinco puntos clave sobre el papel de "más" en la sociedad moderna que influyen en todo debate sobre el tema.

  • Más no es físicamente posible en un momento en que "utilizamos 1 ½ recursos del planeta cada año".
  • Más es fundamental para la economía capitalista, lo que hace que "desafiar más sea un gran negocio".
  • Más está ligado al sueño americano. "Estados Unidos es una sociedad con aspiraciones... Así que tenemos que preguntarnos: "¿Más de qué?"".
  • Más es un obstáculo para la justicia. "Algunas personas necesitan más", por lo que cualquier desafío al paradigma del "más" debe incluir formas de compartir mejor los recursos.
  • A veces, más es mejor. Pero hemos confundido casos concretos, como más alimentos para las víctimas del hambre, con nuestros objetivos generales. En realidad, "esta obsesión por el más está minando el mejor".

Las observaciones de Leonard sirvieron de telón de fondo al acto, que reunió a personas que trabajan en temas económicos y ecológicos procedentes tanto de fundaciones como de organizaciones activistas. "Se trata de una invitación a reconsiderar juntos nuestros análisis, nuestras estrategias y nuestras opciones", explicó Harriet Barlow, Directora Fundadora del BMC y copresidenta de la conferencia. "Podemos no tener miedo a ser tan radicales como sea necesario para lograr el cambio de sistemas que se necesita".

Un brillante ejemplo de "mejor, no más" debatido en Just Giving fue el auge de las iniciativas de economía social en Quebec en las dos últimas décadas. En la actualidad, más de 7.000 cooperativas y empresas sin ánimo de lucro proporcionan 125.000 puestos de trabajo y representan el 8% del PIB de la provincia, según Nancy Neamtam, cofundadora de Chantier de L'Economie Sociale. Ocho redes de empresas colectivas (que, según ella, tienen un índice de pérdidas por inversiones inferior al de las empresas convencionales) gestionan un fondo de 32 millones de dólares (canadienses) para vivienda y otro de 53 millones para otros proyectos.

Opal Tometi, cofundadora de Black Lives Matter y directora de la Alianza Negra para una Inmigración Justa, señaló que la reciente crisis sanitaria del ébola es un trágico ejemplo de cómo "mejor" pierde frente a "más" (para los más ricos del planeta). La enfermedad estalló en naciones de África Occidental donde se habían recortado los programas de salud pública en la ola de medidas de austeridad mundial, explicó. "Hará falta un movimiento internacional multirracial para garantizar que las vidas negras importan, no sólo en Estados Unidos, sino en todo el mundo".

© Jay Walljasper
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