La filantropía sueña con un cambio transformador, pero opera dentro de una visión del mundo dominante que favorece a los hombres blancos, el capitalismo, la extracción, el crecimiento ilimitado y el conocimiento institucionalizado. Cada vez más, nuestros intentos de infundir nuestro trabajo dentro de un marco de "justicia social" o "bien común" cambia el capitalismo en los márgenes en el mejor de los casos, mientras que en el peor hace que el capitalismo sea tolerable para la mayoría de los habitantes de la Tierra que no son los "ganadores" en este modelo. Esto aborda los síntomas, no las causas.

Debemos preguntarnos: ¿De qué otras formas influyen las visiones dominantes del mundo en nuestra forma de pensar y actuar? ¿Cómo limitan lo que imaginamos y, por tanto, lo que financiamos? En nuestro planeta, desbordante de visiones del mundo y enfoques de la comunidad, ¿cómo nos comprometemos con los más compatibles con los objetivos de la filantropía y los potenciamos? Si otro mundo es posible, ¿podemos financiar nuestro camino hasta allí? Y si es así, ¿cómo pueden nuestras inversiones y prácticas reflejar el mundo que queremos ver?

Tres ponentes nos explicaron cómo la filantropía ha sido moldeada por las visiones del mundo dominantes y cómo las visiones del mundo alternativas pueden ayudar a los financiadores a alcanzar su objetivo último de un mundo mejor para todos, de un cambio transformador.